Recientemente, el mercado residencial de lujo de Florida se conmocionó al conocer la venta de una propiedad ubicada en La Gorce Island, frente a la Bahía de Biscayne. A poco de suceder la operación inmobiliaria, el mundillo del real estate de los Estados Unidos se convirtió en un hervidero. Y no era para menos, se trataba de una transacción de US$132 millones, la cual fue dividida entre dos compradores. Pero la concreción del acuerdo no fue sencillo.
La propiedad de casi 1214 hectáreas – y que había sido de M. Lee Pearce (un médico y filántropo) hasta su muerte en 2017– había ingresado, hace un tiempo, al mercado con un valor mucho más importante. Por aquel entonces, la impactante mansión había irrumpido con una cotización que rondaba los US$170 millones. Después de ser ofrecida por portales especializados y mostrada -sin éxito- por importantes brokers fue retirada de la comercialización.